domingo, 22 de abril de 2012

Sobre el apego y el desapego...

Han sido muchas las mentes pensantes que han tratado de poner nombre esa especie de conexión que en ocasiones parece darse entre dos sujetos. La respuesta a esta inquietud ha sido la palabra Apego, y recurriendo a ella parece fácil explicar a que se debe esa sensación gratificante respecto de lo que te aporta una persona. Mi criterio respecto de esta cuestión pasa un poco por la Física y la Química que de algún modo acaba condicionando nuestra afinidad hacia una persona. Realmente creo que el éxito de la interacción social se basa en una aportación de sensación que irremediablemente surte un efecto que nos lleva a sentirnos en mayor o menor medida bien. A veces cuando esta afinidad se proyecta sobre los pilares de una personalidad consolidada tenemos ese cuadro tan particular en el que surge cierta dependencia a esa conexión. Ocasionalmente surge de una forma tan incontrolable como placentera y eso nos mueve de una forma especial porque hace que nos sintamos vivos, partiendo de esta base se puede obviar que mucha gente nos acaba resultando de algún modo indispensable. El caso es que este tipo de relaciones son un poco como una planta , requieren constancia si,como un fluir especial para que pueda lucir ,a veces esa conexión parece que viene rodada. tenemos entonces esa situación que nos hace sentir vivos. A que se debe , creo que es irrelevante , parece que viene dado bien por el azar bien por una predisposición de alguna divinidad. Incluso dentro del cáos hay un orden, esto es lo mismo y no es necesario un porque en todo caso deberíamos hablar del simple y a la vez complejo de devenir de las cosas. No es necesario saber porque un pato reciennacido sigue a su madre es mecánico y esta dispuesto así de algún modo y por eso funcionan las cosas, quizas una explicación sencilla sea que no somos mas que piezas de una compleja maquina predestinadas a una tendencia a la armonía con otros muy concretas siempre que la aproximación y conexion sea acertada. Vemos que esto provoca grandes inquietudes porque el ser humano pensante trata de encontrar explicaciones para poder controlar las situaciones que provocan esa que se zarandeen en lo profundo de su foro interno. Vemos como mucha gente sucumbe en el intento o se acobarda dejando pasar cada tren a pesar de que el viaje se les pueda antojar interesante. Me atrevo a decir que creo que eso genera espinas que no todo el mundo se quita o que en muchos casos ni siquiera les marca y creo que esa gente de algún modo se pierde lo mejor. A veces hay que apostar por la incertidumbre. He de decir que alcanzado este estadio de conexión de amores y desamores no todo esta hecho a veces hay que ser conscientes de que debe haber un equilibrio en ese toma dame con el que ambas partes se sientan vivas y con ganas de crecer, creo que en ello radica el éxito y el bienestar emocional. Realmente podemos apuntar con el dedo tanto a quien se ha retirado antes de la batalla le duela mas o menos como aquel que habiendo dado el paso en pro a una ilusión o expectativa se olvida de que hay que alimentar esa ilusión por ser feliz un principio base que es ser feliz exigiendo y recibiendo al menos lo mismo que tu das es tan sencillo incluso como el dicho de la pescadilla que se muerde la cola... creo que esto podría empezar a parecerse a un capitulo de la biblia y eso suena raro en mi, bueno ... no se si hay alguna similitud con un pasaje de la biblia. Pero creo que el éxito de la conexión entre personas es que fluya un equilibrio ordenado , ya que exigir sistemáticamente alimenta el crear expectativas que de algún modo reactivan una serie de decepciones cuando no se alcanzan, y nos lleva a proyectar de algún modo esa decepción sobre la otra persona injustamente. Es entonces cuando surgen las desconfianzas y un malestar que hace que esa química se reduzca a una tolerable dinámica rutinaria en la que no parece necesario exteriorizar esas cosas que nos hacen sentir vivos de esa forma tan natural como aquellos sentimientos que avivaban la pasión . Esto nos lleva inevitablemente a Hacer una reflexión sobre que momento ha habido un error buscando un responsable obviando que lo hay, pero no debemos asumir que todo deja de pasar y pasa de nuevo por algo. Bueno conclusión debemos alimentar lo que tenemos cada día porque si tiene lugar es por algo y dejarlo de lado solo nubla nuestra perspectiva de como el equilibrio esta en dejarse llevar como quien se deja simple y llanamente mecer por las ondas en el agua.